7 y 8 de Octubre de 2001
Única Visita a Suiza
El Presidente venezolano llega a la Confederación Suiza el domingo 7 de octubre de 2001 en lo que sería la primera y única visita que realizaría a esta nación europea.
Comienza el desarrollo de su agenda en la ciudad de Ginebra, también conocida como la capital de la paz, el mismo día en que paradójicamente el Gobierno republicano del Presidente estadounidense, George Walker, Bush iniciaba los bombardeos sobre Afganistán.
Al día siguiente de los ataques del 11 de septiembre de 2001, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas había aprobado en su 4370a sesión la Resolución 1368 (2001), la cual en sus consideraciones hacía una referencia al derecho a la legítima defensa.
Este artilugio jurídico fue usado por el establishment estadounidense para el ataque a la nación afgana, obviando los Convenios de Ginebra de 1949 y sus protocolos adicionales.
Posteriormente, las fuerzas invasoras estadounidenses se hicieron acompañar en muchos casos, de manera absolutamente simbólica, de militares de más de cuarenta (40) países, incluso de naciones centroamericanas, como parte de una estratagema de legitimación internacional de los ataques.
Sin embargo, como lo señalan Isbert Carrasquel y Jhondry Malavé en un trabajo investigativo del año 2005, al abordar la operación militar de los estadounidenses y sus aliados, desde el punto de vista jurídico internacional:
…Aun cuando muchos consideran que Estados Unidos estaba en su legitimo derecho a defenderse de los ataques terroristas del 11-S, derecho que se encontraría establecido en la Carta de Naciones Unidas en su Art. 51 “Ninguna disposición de esta Carta menoscabará el derecho inmanente de legítima defensa, individual o colectiva, en caso de ataque armado contra un Miembro de las Naciones Unidas…”, otros por otro lado consideran que la acción de Estados Unidos contra Afganistán fue una simple acción de venganza, los ataques que recibió de una red terrorista, no le daba pie ni a USA ni a la OTAN, para atacar a un país que había sufrido cruentas guerra y vicisitudes, además de considerar, que Estado Unidos debió esperar a que el Consejo de Seguridad de la ONU, hiciera lo propio y cesar sus acciones militares, en el momento en que salió a relucir, su primera Resolución, tal como lo establece el mismo Art. 51, cuando señala que el derecho de legítima defensa, existe “hasta tanto que el Consejo de Seguridad haya tomado las medidas necesarias para mantener la paz y la seguridad internacionales”…
En este conflictivo y paradójico escenario internacional, llega el Presidente venezolano a la capital mundial de la paz, el domingo 7 de octubre de 2000, una casual ironía de la historia.
En Ginebra, desarrolló una agenda que incluyó un encuentro con el Consejero Federal del Gobierno suizo y Jefe del Departamento Federal de Asuntos Exteriores, Joseph Deiss; donde, además de los temas de la actualidad internacional, revisaron la agenda bilateral en un esfuerzo orientado a incrementar el fortalecimiento de las relaciones entre Suiza y Venezuela.
Producto de estas conversaciones se anunció la llegada, en los primeros meses del año 2002, de una delegación empresarial de Suiza a Venezuela.
Posteriormente, sostuvo un encuentro con Mike Moore, Director General de la Organización Mundial de Comercio (OMC), en el que abordaron aspectos de la nueva ronda mundial de negociaciones comerciales que daría inicio en noviembre de ese año en la ciudad de Doha, Qatar, en la cuarta conferencia ministerial de la OMC.
El Presidente venezolano expuso que los países en desarrollo, como la República Bolivariana de Venezuela, no podían renunciar a la libertad de fijar sus propias políticas de desarrollo en materia de comercio. Planteó la necesidad de hacer cumplir los acuerdos de la Ronda Uruguay, destacando además que esta era la posición consensuada del Grupo de los 15 (G-15), que había sido acordada en la cumbre realizada en Yakarta, Indonesia, cuando, precisamente, la nación venezolana asumió la presidencia del G-15.
Por otra parte, se reunió con el Director General de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad), el brasileño Rubens Ricupero, en la sede de este organismo. Luego de pasar revista a los temas de interés mutuo, acordaron la realización en Venezuela de una actividad sobre las perspectivas políticas, económicas y sociales de las naciones latinoamericanas.
Su agenda continuó con una reunión con el Alto Comisionado de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), en momentos en que el tema de Afganistán ocupaba la mayor parte de la atención de esta instancia especializada del sistema de Naciones Unidas.
El Presidente recordó que Venezuela había sido la primera nación en ofrecer ayuda a los refugiados de Afganistán, entre ellos mujeres, ancianos y niños, protegidos por los Convenios de Ginebra de 1949 y sus protocolos adicionales.
En esta ocasión, el Presidente venezolano abordó con el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados los diferentes aspectos del compromiso venezolano para ejecutar las acciones de ayuda.
Posteriormente, presidió la delegación venezolana que estuvo presente en la Conferencia de las Partes (COP5) de la Convención de Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación.
En este escenario fue suscrita una carta de intención con un conjunto de países en materia de cooperación para el desarrollo de proyectos agrícolas de mujeres africanas en sitios semidesérticos, en condiciones de desnutrición extendida, y para cooperar en el establecimiento de algunos pequeños sistemas de riego en países del África y de América Latina.
Su actividad continuó con una reunión con los representantes de los Presidentes y/o Jefes de Estado del Grupo de los 15.
El G-15 venía incrementando su perfil como interlocutor de los países del sur; como se recordará, este mecanismo fue establecido en septiembre de 1989, como un apéndice del Movimiento de los Países No Alineados, por un grupo de países en desarrollo, con el objetivo de estrechar la cooperación y el desarrollo entre los países miembros, y coordinar los esfuerzos de cooperación sur-sur.
El G-15 había incrementado su composición a otras naciones y congregando a países provenientes de Asia, África, América Latina, y el Medio Oriente. El Presidente venezolano ostentaba la Presidencia del Grupo de los 15, misma que había asumido en la Cumbre de Yakarta, oportunidad en la cual había solicitado autorización para iniciar acciones con el objetivo del fortalecimiento del grupo.
Se trabaja, entonces, en el reposicionamiento del G-15 como un interlocutor válido, con el fin de impulsar la cooperación sur-sur y el diálogo norte-sur.
De hecho, en este encuentro se dio inicio al plan 2001-2002 para el fortalecimiento del grupo, marco en el cual se convocó, posteriormente, una reunión del G-15 en Caracas, Venezuela, en julio de 2002.
En Ginebra, este primer día de actividad en la Confederación Suiza marcaría, además, el ritmo y la intensidad de la gira que recién iniciaba.
En horas de la noche de ese domingo 7 de octubre de 2001 realizó reuniones de trabajo, tanto con el Embajador venezolano ante la misión diplomática con sede en Berna, como con el Embajador venezolano ante la OMC y demás organismos internacionales con sede en Ginebra.
Para al día siguiente, lunes 8, luego del protocolo de rigor se dirigió a París, Francia.