6 al 15 de Agosto de 2000
Arabia Saudita, Kuwait, Qatar, Emiratos Árabes Unidos, Irán, Irak, Indonesia, Libia, Nigeria y Argelia
Del 6 al 15 de agosto de 2000 realiza la que sería, hasta ese momento, la más importante gira internacional de su política exterior, que lo llevó a visitar los diez (10) países que, junto a Venezuela, conformaban la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep). Así, viajó a Arabia Saudita, Kuwait, Qatar, Emiratos Árabes Unidos, Irán, Iraq, Indonesia, Libia, Nigeria y Argelia.
El objetivo principal de esta gira fue reiterar, esta vez personalmente, la invitación a sus homólogos de los países integrantes de la organización petrolera para que asistiesen a la histórica II Cumbre de Soberanos, Jefes de Estado y de Gobierno de la Opep, que se realizaría en Caracas del 26 al 28 de septiembre de 2000.
Es de recordar que un año antes, en julio de 1999, Chávez Frías había enviado a esos países a una misión especial encabezada por el Viceministro de Relaciones Exteriores, Embajador Jorge Valero Briceño, mediante la cual había hecho llegar a sus homólogos una misiva en la que les formulaba, a cada uno de ellos, expresa invitación para la cumbre petrolera en Venezuela.
Posteriormente, en julio de 2000, nuevamente envía al Embajador Valero Briceño a esos países, en calidad de Embajador en Misión Especial, para organizar y ultimar los detalles de su visita a los mismos, la cual realizaba en esta ocasión.
De esta manera, con una reducida comitiva compuesta por una delegación oficial, así como una delegación técnica, parte el domingo 6 de agosto al Reino de Arabia Saudita, en lo que sería el primer destino de su más polémica gira internacional realizada hasta el momento.
En la coyuntura interna, una semana antes de partir, Chávez Frías había obtenido la relegitimación de su condición de Presidente de Venezuela, en las elecciones efectuadas el día domingo 30 de julio de 2000, y durante el transcurso de los días siguientes había sido, debidamente, proclamado como tal, por las autoridades correspondientes de la institución electoral venezolana (Consejo Nacional Electoral).
De esta manera, iniciaba esta gira con la reafirmación de su liderazgo político y la legalidad y legitimidad necesaria que le confería el proceso electoral de julio de 2000, dispuesto a reafirmar también el peso internacional de la organización petrolera que controlaba el cuarenta y dos por ciento (42%) del mercado mundial del crudo.