10 al 12 de Octubre de 1999
Shanghai y Beijing
Gira al Asia
El 8 de octubre de 1999 el presidente Hugo Chávez encarga de la Presidencia de la República al Ministro de Relaciones Interiores, Ignacio Arcaya, a fin de continuar su avanzada internacional, y parte ese mismo día a un recorrido que lo llevó, en el mismo orden en que se citan, a la República Popular China, Japón, República de Corea, la Región Administrativa Especial de Hong Kong, Malasia, República de Singapur, República de Filipinas, República de la India, Estado de Qatar, Reino de España y la República Francesa. El primer mandatario nacional y su comitiva, luego de un larguísimo periplo aéreo con escalas técnicas en las localidades estadounidenses de Minneapolis y Anchorage (Alaska); así como en Petropavlovsk (Kazakhstan), finalmente llegó al Aeropuerto Internacional Hongquiao en la ciudad de Shanghai, en la República Popular China, en las primeras horas de la mañana del 10 de octubre de 1999.
En este primer contacto en la nación china su estadía fue desde el 10 al 13 de octubre, en un año especialmente significativo, ya que coincidió con el mes aniversario del quincuagésimo (50º) aniversario de la fundación de la República Popular China (1º de octubre de 1949); del vigésimo (20º) aniversario del inicio de las transformaciones realizadas por Deng Xiao Ping,268 y porque, adicionalmente, esa nación asiática se preparaba para la celebración del retorno de Macao a su soberanía, evento que se produjo, tal como estaba previsto, el 20 de diciembre de ese mismo año.
Por otra parte, tanto Venezuela como China, el 28 de junio de 1999 habían conmemorado el vigésimo quinto (25º) aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas. En este contexto, la primera actividad oficial de Chávez Frías fue en Shanghai, con el alcalde de esa localidad, Sr. Xu Kuangdi, quien luego de reunirse en audiencia privada y honrarlo con un banquete, lo trasladó a la llamada Zona Económica Especial de Pudong.
Allí, el primer mandatario nacional se reunió con los artífices de la modernización de la ciudad de Shanghai, transformación realizada en gran medida por los aportes de inversión extranjera directa, orientada a la construcción de modernos centros comerciales, y a la instalación de tecnología portuaria de punta, que ha contribuido significativamente con el pujante desarrollo de esta vanguardista localidad china.
Entre las expresiones del presidente Chávez en las diferentes intervenciones que realizó en la ciudad de Shanghai, se le oyó decir que “la nueva China” se había creado en 1921, cuando él aún no había nacido, con la fundación del Partido Comunista de China.
Del mismo modo, no dejó pasar desapercibido el vigésimo (20°) aniversario de las reformas emprendidas en esa nación en 1979. Al efecto, señaló que “…la modernidad también es una evidencia muy concreta de los 20 años de reformas a la revolución china, emprendidas por Deng Xiaoping…”, haciendo propicia la ocasión para enlazar ambos acontecimientos diciendo que “…son dos ejemplos de que puede haber una alternativa a eso del neoliberalismo y el comunismo…”, para concluir señalando “…resulta que es factible combinar sistemas. Tener un capitalismo con sistema social. Es posible combinarlos, no hay otra alternativa…”.
Siguiendo un estricto orden cronológico, ese mismo día en horas de la tarde se trasladó a Pekín, donde luego del tratamiento protocolar en el aeropuerto y su visita al día siguiente en horas de la mañana a la Gran Muralla China, es menester hacer mención a la ceremonia oficial de bienvenida, de la cual fue objeto en esa ciudad, con una parada militar en la emblemática Plaza de Tiananmen, donde fue recibido con todos los honores por su homólogo de la República Popular China, Jiang Zemin, con quien posteriormente abordó el amplio espectro de las relaciones bilaterales chino-venezolanas
Luego de la reunión de trabajo, ambos mandatarios procedieron en el Gran Palacio del Pueblo de Pekín a la ceremonia de suscripción de un conjunto de instrumentos que se vinieron a sumar a los ya existentes entre ambas naciones, y que en su conjunto servirían como basamento jurídico para el desarrollo de la relación bilateral.
En esta oportunidad en el área educativa, se suscribió una carta de intención entre la Universidad Central de Venezuela y la Universidad del Pueblo de China; un convenio de cooperación entre la Universidad de Los Andes y la Universidad de Nanjing; y, finalmente, un convenio de cooperación entre el Instituto de Altos Estudios Diplomáticos “Pedro Gual” de Venezuela y la Academia Diplomática de la República Popular China.
En el área energética se firmó una carta de intención para el suministro de orimulsión entre la empresa Pdvsa-Bitor y la China National Fuel Oil Corporation Limited, así como un memorándum de entendimiento para el establecimiento de una comisión mixta que desarrolle este sector.
Del mismo modo, se firmó un memorándum de entendimiento para la negociación de un acuerdo de promoción y protección de inversiones; un memorándum de entendimiento para la obtención de una línea de crédito por un monto de treinta millones de dólares (US$ 30.000.000) para la adquisición de maquinarias agrícolas; y una carta de intención entre la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) y la Corporación Nacional China para la importación y exportación de plantas completas, para la promoción de la pequeña y mediana industria de la madera en los estados Anzoátegui, Bolívar y Monagas.
Como acto final, se realizó un canje de notas diplomáticas, entre los Ministerios de Relaciones Exteriores de ambos países, para la extensión de la jurisdicción del Consulado General de Venezuela en Hong Kong a la Región Administrativa Especial de Macao que, como se indicó, retornaba a la soberanía china en diciembre de 1999.
Por otra parte, también destacan dentro de las actividades previstas en esta ocasión, el banquete de Estado, que con posterioridad al acto de suscripción de los acuerdos, le ofreció el presidente Jiang Zemin a su homólogo venezolano, y el encuentro de éste con el ministro del departamento de enlace internacional del Partido Comunista de China, Dai Bingguo.
El día 12 de octubre, Chávez Frías dio inicio a su jornada con la colocación de una ofrenda floral ante el Monumento de los Héroes del Pueblo, ubicado en la Plaza Tiananmen, donde rompió el estricto protocolo lanzando una de las flores de la corona al monumento.
Posteriormente, se dirigió caminando hasta el mausoleo del líder de la Revolución China, Mao Tse Tung, ubicado en uno de los laterales de la Plaza Tiananmen y frente a la llamada Ciudad Prohibida, residencia del famoso último emperador, Pu Yi; en donde también colocó una ofrenda floral, para luego firmar el libro de las celebridades que visitan el mausoleo
Luego de esta ceremonia, en la misma mañana, instaló el seminario “Oportunidades de Inversión en Venezuela”, el cual se desarrolló en la sede del importante Consejo Chino para la Promoción del Comercio Internacional (CCPIT).
El seminario contó con una numerosa asistencia de empresarios chinos, entre los cuales estaban los ministros de la economía, directores de fondos de desarrollo y más de medio centenar de empresarios que participaron en la gira presidencial a Asia.
El presidente Chávez realizó una intervención en la cual tuvo la oportunidad de exponer las potencialidades y oportunidades que para la inversión extranjera ofrecía Venezuela
A este respecto, la prensa local venezolana reseñaba declaraciones del Embajador Jorge Valero Briceño, Viceministro de Relaciones Exteriores, sobre el interés del gobierno chino en aumentar sus inversiones en Venezuela en el sector de hidrocarburos, a través de la empresa China National Petroleum Corporation, la misma que operaba en Venezuela dos campos obtenidos en las licitaciones de la tercera ronda de la apertura petrolera venezolana.
Durante la misma mañana Chávez Frías se entrevistó con el Sr. Li Ruihuan, Presidente de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino; quien, además, era uno de los cinco (5) miembros del comité central del influyente Partido Comunista de China.
Los contactos y reuniones con los máximos jerarcas de esta nación continuaron durante ese día, ya que en horas de la tarde también se reunió con el Primer Ministro chino, Zhu Rongji. En su intervención en esta ocasión, el Presidente venezolano destacó el hecho de que su visita coincidiera con la conmemoración del quincuagésimo (50º) aniversario de la fundación de la República Popular China, diciendo que “…dentro de 50 años más, Venezuela será en América Latina, lo que son ustedes, un portento de país…”, destacando así mismo la importancia “…del ejemplo que le están dando al mundo…” en relación a “…cómo construir un modelo económico adecuado a las especificidades chinas, sin someterse a los dictámenes del neoliberalismo salvaje…”.
Entre ambos mandatarios hubo un fructífero e intenso intercambio de puntos de vistas, tanto de las situaciones internas de los dos países, como de la coyuntura internacional; que demostró, entre otras cosas, la excelente preparación y apoyo que recibieron de sus funcionarios, así como el conocimiento que cada uno poseía de la relación bilateral.
En esta entrevista, el Primer Ministro, Zhu Rongji, le expresó al presidente Chávez:
…el apoyo y respaldo de esta nación y del pueblo chino contra los ataques internacionales que ha recibido en reiteradas oportunidades, a los cambios emprendidos en Venezuela. Aunque ciertas fuerzas nacionales e internacionales conservadores (sic) están en contra de su causa, el Gobierno y el pueblo (chino) estamos de su lado…
Igualmente durante este encuentro realizado en el Palacio del Pueblo, el Primer Ministro chino resaltó la importancia del alto índice de popularidad y apoyo de los venezolanos para con el presidente Chávez “…porque está atendiendo una causa de progreso…”; refiriéndose al proceso de cambios que él lideraba como una “revolución pacífica”.
Del mismo modo, resaltó el apoyo del gobierno de Chávez Frías a la nación asiática en instancias internacionales, calificándolo como un buen amigo de ese país y le informó que el Presidente chino, Jiang Zemin, le habría solicitado que agilizara los trámites conducentes al desarrollo de los proyectos de cooperación suscritos con Venezuela.
El intercambio de ideas entre ambos líderes se desarrolló en una atmósfera de mutuo entendimiento y hasta camaradería, como si ambos se conocieran desde hacía años, al punto que durante un almuerzo en el Palacio del Pueblo, ofrecido al Presidente venezolano por el Primer Ministro chino, Zhu Rongji; éste sintiéndose inspirado por la música entonada por la banda del Ejército de su país tomó el micrófono e interpretó buena parte de la pieza, a lo que el presidente Chávez correspondió cantando “El Alma Llanera”, que calificó como el segundo himno nacional de Venezuela.
Pero, mucho mas allá de los hechos anecdóticos, si algo quedó claro en este encuentro fue la plena coincidencia de criterios entre los gobiernos de China y Venezuela en principios básicos de las relaciones internacionales, especialmente la No Injerencia en asuntos internos y el respeto a la soberanía; así como la aspiración de alcanzar un mundo multipolar.
Sobre este tema, destaca la disertación que sobre la realidad venezolana y su visión de las relaciones internacionales contemporáneas expusiera ante más de dos centenares de invitados en la Universidad de Pekín, en la cual nuevamente se le oiría hablar sobre la importancia de promover esfuerzos que contribuyeran al surgimiento de un sistema internacional pluripolar, como una manera de hacer contrapeso a la tendencia a la unipolaridad de la época.
En tal sentido, fue lo suficientemente explícito al señalar: “… invitamos a este país a que siga levantando su bandera. No podemos seguir con un solo policía queriendo organizar al mundo…”
Del mismo modo, se refirió al eventual rol a que están llamadas a jugar tanto la América Latina, como la República Popular China, en la construcción de un sistema multipolar.
Las alusiones en tal sentido continuaron en esta Universidad diciendo que: “…hemos comenzado a producir una política mundial autónoma, independiente de cualquier centro de poder y en eso también nos parecemos a China…”.
Igualmente, destaca el hecho que cuando el Sr. Chen Jia Er, rector de esa Universidad, hizo una semblanza de Chávez Frías a manera introductoria para presentarlo a la audiencia, no mencionó su participación en las rebeliones militares del 4 de febrero y del 27 de noviembre de 1992 en Venezuela. Al respecto, algunos analistas han señalado que tal omisión pudo haber sido motivo de un olvido o descuido del rector Chen Jia Er, así como otros se inclinan a pensar que fue por prudencia o delicadeza de su parte, lo cierto es que el mismo mandatario venezolano informó a los presentes sobre estos particulares
Al serle solicitada su opinión por algunos hechos aislados de violencia acontecidos en China y sobre la libertad de expresión en esa nación, dijo que por proceder de una región donde la pobreza mata a la infancia y existen diferentes formas de discriminación, no poseía moral para criticar a una nación que como China había alcanzado logros significativos en materia económica y social.
Una vez finalizado el encuentro en la prestigiosa Universidad de Pekín, Chávez Frías ofreció una rueda de prensa en la Casa de Huéspedes de Estado de Diaoyutai, donde se alojaba junto con algunos ministros y militares integrantes de su comitiva; en dicha entrevista, durante un poco más de una hora, básicamente expuso a los corresponsales internacionales sus ideas sobre el proceso de transformaciones que se adelantaba en Venezuela, así como los objetivos de esta gira asiática y el futuro de la relación bilateral.
Mención aparte merece, igualmente, su encuentro con el cuerpo diplomático iberoamericano acreditado en la ciudad de Pekín, donde tuvo la oportunidad de tener contacto con los jefes de las misiones diplomáticas de varias naciones del subcontinente latinoamericano; así como también de Italia, España y Portugal, y finalmente mantener un encuentro con miembros de la pequeña colonia venezolana residente en la capital china.
El China Daily, periódico en idioma inglés editado en China, el último día de la visita tituló “La nación valora relaciones con Venezuela”, destacando en la reseña periodística que el presidente Chávez Frías y el Primer Ministro, Zhu Ronjhi, expresaban su alegría porque ambas naciones mantendrían unas largas, estables y amistosas relaciones.
Por su parte, Chávez Frías calificó la visita de Estado a China como muy positiva, ratificando la importancia de los distintos acuerdos firmados, al tiempo que reiteraba que los lazos entre Venezuela y esa nación seguirían profundizándose.
Asimismo, es de destacar que al margen de las actividades desarrolladas por el primer mandatario venezolano, los miembros de la delegación oficial que le acompañaba realizaban contactos con sus homólogos para explorar posibilidades de desarrollo de las relaciones, en sus respectivas áreas de competencia.